LA ALIANZA DE BAILEYS Y CHURRERÍA EL MORO
Imágenes: cortesía
Las mezclas inesperadas suelen arrojar dos tipos de resultados: un éxito rotundo o un estruendoso desacierto. El caso de la colaboración entre Baileys y El Moro, se inscribe definitivamente dentro del primer grupo. La marca de crema irlandesa y la churrería mexicana unieron saberes y sabores para crear una edición limitada que producirá un doble efecto.
Por una parte, el nuevo sabor a churros de Baileys complacerá a los amantes de la indulgencia, que podrán entregarse con gusto a los aromas y sabores a canela y azúcar presentes en esta crema irlandesa. Por otra, representa una interesante y hasta inesperada fusión, que involucra las culturas mexicana, irlandesa, española y más. Vale la pena echar un breve vistazo a la historia para entender esta poco común unión.
En 1935, desde su natal Elizondo, pueblo español del valle del Baztán, Francisco Iriarte viajó a la Ciudad de México, donde en aquel tiempo no se conocían los churros; para traer un poco de su cultura y aprovechar la oportunidad de negocio, comenzó a venderlos en un carrito en el Zócalo. El nombre con que lo designó fue un homenaje al hombre que los vendía en las fiestas de su pueblo, apodado El Moro, en alusión a sus orígenes árabes. Dos años más tarde, los churros se habían popularizado en gran medida y, a raíz del éxito de su iniciativa, logró adquirir un local en el número 42 de la avenida San Juan de Letrán, hoy Eje Central. Desde ahí se consolidó un éxito que hoy tiene más de 85 años.
Baileys, por su parte, revolucionó el panorama con el lanzamiento en 1974 de la crema de whisky irlandés, que comenzó un camino que la ha llevado a 180 países, apoyada en el equilibrio entre sus componentes, que se ha convertido en una opción favorita de quienes buscan consentirse y hacer un paréntesis en su rutina.
En línea con su gen innovador, y en alianza con un símbolo de la capital mexicana como la Churrería El Moro, Baileys presenta esta nueva edición que apunta a complacer a los seguidores de la marca, según explica Juan Pablo Molinar, embajador de Baileys México: “Siempre apostamos por la constante innovación de sabores y mezclas que sorprendan a los fanáticos de la indulgencia a través de propuestas irresistibles con las que puedan consentirse. Estamos felices de aliarnos con una marca de gran tradición como Churrería El Moro”.
A través del nuevo sabor, se presenta una nueva manera de disfrutar este tradicional postre. “El sabor de nuestros icónicos churros con el delicioso equilibrio de la crema de whisky irlandés hace de esta edición limitada una bebida única”, dice Francisco Iriarte, vicepresidente de El Moro, y añade: “Esta alianza representa la perfecta fusión de la tradición mexicana con una marca global, y nos enorgullece ver la unión de la calidad de ambas en un mismo producto”.
Además del sabor a churros como evidente lazo que une a estas casas, la botella de esta edición limitada exhibe detalles que remiten a Churrería El Moro, como la tipografía y elementos de diseño. Y, para llegar al punto que más interesa a quienes desde que leyeron “sabor churros” salivan o sienten curiosidad, Baileys sabor churros puede conseguirse ya en Sam’s Club y, a partir de marzo, estará disponible en tiendas especializadas y de autoservicio de todo el país. Una vez que lo tengan, podrán disfrutarlo en las rocas o shakeado con hielo y chocolate caliente, según dicte el antojo.